MUSICA DE DESPEDIDA

viernes, 30 de marzo de 2012

FASE II TOMA DE DECISIONES

SEMANA DEL 19/03/2012 AL 25/03/2012 
Objetivos:
  • Seleccionar menores que participaran del proyecto.
  • Matizar los objetivos a trabajar.
  • Concretar y planificar las distintas actuaciones. 
  •  Establecer un calendario de trabajo.
Al principio de la semana continué estudiando los cuestionarios que me facilitó el tutor, los vi interesantes e indague sobre bibliografía que me ayudase a plantear el proyecto y a realizar una selección de los menores con los que se iba a trabajar. Organicé los datos que había obtenido y se los presenté al tutor.  Por los datos obtenidos escogimos 5 menores, en base a sus expedientes y a las puntuaciones obtenidas en los cuestionarios. El resto de menores que participarían se consultaría con el grupo de trabajo.
El cuestionario fue pasado a 20 menores y en general las puntuaciones relativas al “chequeo de habilidades sociales de Goldstein, las habilidades menor puntuadas fueron las del grupo III y IV (habilidades relacionadas con los sentimientos y habilidades alternativas), siendo la media de 120 puntos sobre 250 y en el Inventario de asertividad de Gambrill y Richey, un 75% de la muestra entraron en el grupo de “no asertivos”. (Corresponde a sujetos que puntúan por encima de 96 en la escala de malestar y por encima de 105 en la de probabilidad de respuesta) y un 20 % entraron en el grupo de “Ansiosos” (Correspondería a sujetos que puntúan por encima de 96 en malestar y por debajo de 104 en probabilidad de respuesta y serían personas que, aunque suelen ser capaces de mostrar conductas asertivas, suelen presentar bastante ansiedad en el momento de la ejecución) y un 5%en el grupo de “despreocupados”· (sujetos que puntúan por debajo de 95 en  malestar y por encima de 105 en probabilidad, y correspondería a personas que a pesar de que no suelen mostrar conductas asertivas, tampoco presentan manifestaciones de ansiedad).
Al día siguiente nos reunimos en pleno con el equipo de trabajo, durante dicha reunión se expusieron los resultados y se seleccionaron a los menores que iban a participar, había algunos dudosos, los criterios estuvieron claros, aquellos menores cuyas puntuaciones dentro de los rangos de los diferentes cuestionarios tipo (anteriormente citados) sean más bajas y aquellos en los que se haya observado o dentro de su PIEM se incluya o se esté trabajando la falta de competencia social. Se dará prioridad a los menores que estén próximos a finalizar su medida de internamiento. Al final de la selección nos quedaron 10 pero dos de ellos los descartamos por incompatibilidades, algunos de ellos estaban asistiendo a recursos externos tanto educativos, como de búsqueda de empleo  etc. y otros estaban participando de otros programas ya empezados e incluirlos en el programa Aprende sería una sobrecarga, dejando el grupo en 8 participantes.
Por otra parte se elaboró un calendario de reuniones y tareas, quedamos para el final de semana para matizar objetivos y contenidos a tratar en el proyecto

jueves, 29 de marzo de 2012

FASE I PRESENTACION Y ANALISIS

SEMANA DEL 12/03/2012 AL 18/03/2012 

SEGUNDA REUNIÓN

En la segunda reunión con mi tutor (a principios de esta semana), expuse todo lo que había ido realizando en la semana anterior, mis observaciones en los módulos y las informaciones recopiladas, le hice partícipe de mi digamos “agobio” de no saber por dónde empezar, de que había más menores de los que en un principio me pensaba que sería bueno incluirlos en el proyecto. A raíz de mis conclusiones pensé en hacer extensivo el proyecto al Centro, hacho que no le pareció mal al tutor, pero me dijo (y comparto ahora su opinión) que debido al poco tiempo que teníamos y las dimensiones del Centro debíamos ser menos ambiciosos, concentrar el proyecto en un grupo de menores y evaluar los resultados, para en un futuro hacer extensivo el proyecto al resto del Centro. El seleccionar a unos u a otros menores para participar en el proyecto debía de ser fruto de los objetivos que se estaban trabajando con ellos y otra serie de variables. Me facilitó unos cuestionarios evaluativos sobre habilidades sociales, asertividad, autoestima; tipo “chequeo de habilidades sociales de Goldstein o Inventario de asertividad de Gambrill y Richey, para ayudarme en la tarea.

A finales de semana, se convocó una reunión con los Equipos Técnicos, donde se expuso el proyecto que se iba a llevar a cabo, se explicó todo lo que se había ido trabajando, se perfiló la organización que se iba a seguir, quedando pendiente la selección de los menores, establecer un calendario de trabajo y crear el grupo definitivo que iba a trabajar en el proyecto. La idea resultó atractiva, y hubo compromiso con la misma, algunos dijeron  incluso que la realización de este proyecto era necesaria, aunque saltaron dudas sobre de la metodología a utilizar y el alcance del mismo. Se expuso que en un principio, se trabajaría de forma grupal con algunos  menores los cuales se seleccionarían y que en base a los resultados se podría generalizar el proyecto, de todas formas el tutor invitó a que en la siguiente reunión, una cada uno expusiese su planteamiento y discutiésemos sobre el tema.

La realización de esta parte del proyecto me llevó más tiempo del esperado, entre el trabajo que me llevaba para casa y el trabajo en el Centro, casi no he hecho otra cosa durante estas dos semanas, aunque no me arrepiento, sé que una parte importante para realizar intervenciones ajustadas a la realidad y a las características tanto del Centro como de los destinatarios es el análisis del contexto, aunque esta vez no tuve que analizar tanto el Proyecto del Centro, el marco normativo, etc. (lo conocía del proyecto anterior) si tuve que analizar más en profundidad los expedientes de los menores, hablar más con los Equipos de Atención y Técnicos ya que en sí, no existía una herramienta concreta que definiese el nivel de competencia social de una persona (como antes pasaba con el IGI_J),  teniendo que indagar más y realizar observaciones de cómo se relacionan y se suele intervenir con los menores.

martes, 27 de marzo de 2012

FASE I PRESENTACION Y ANALISIS

Objetivos:
  • Analizar las características de los menores, así como los diferentes informes.
  • Obtención de datos sobre el nivel de habilidades sociales existente.
  • Conocer resto del equipo de trabajo.
SEMANA 05/03/2012 al  11/03/2012 

Después de 3 meses casi volví al Centro, me entrevisté con mi tutor y mientras acudíamos a la sala de reuniones me encontré con algunas de las personas que participaron en el Prácticum I, nos saludamos y me fueron preguntando sobre mi nueva presencia allí, les comenté que mi intención era pasar con ellos unos meses más y abordar un nuevo proyecto el cual arrancaba a partir de las necesidades detectadas en la evaluación del proyecto anterior, la verdad sentó bien la idea y a partir de ese momento me puse a trabajar.

 Durante estas dos semanas mantuve dos reuniones con el tutor (una por semana).

PRIMERA REUNIÓN

En la primera reunión se perfiló el tema del proyecto y se habló sobre la manera de plantear el tema así como la posible organización del grupo de trabajo. A partir de esa primera reunión empecé a revisar los expedientes de los menores analizando la consecución de los objetivos dentro de cada programa de ejecución y las características de los mismos, revisé la evaluaciones realizadas en el Prácticum I, elaboré una guía que me serviría para realizar una observación del comportamiento de los menores en los distintos módulos y mantuve varias entrevistas informales con los distintos equipos técnicos a los que le pregunté sobre varios menores (que fui pre seleccionando) sobre su evolución y los objetivos que estaban trabajando con ellos relacionados con el tema del proyecto y cómo valoraban su evolución.

Por otra parte acudí a dos de los módulos donde conviven diariamente estos menores con otros compañeros, observando cómo se relacionaban tanto con la figura adulta como con los iguales. Me sorprendió ver que de manera sutil había formados grupos bastante diferenciados, a pesar de ser un grupo estable el cual conviven diariamente, cuyos integrantes comparten experiencias, actividades, etc.; si que existían varios subgrupos. Estos se entremezclaban gracias a la figura adulta pero entre ellos ante situaciones de interacción éstas no eran fluidas, el comportamiento estaba condicionado, o bien para no parecer débil, o para conseguir la aprobación de la figura adulta, en otras ocasiones a la hora de expresar los sentimientos, se hacía de forma no adecuada, emitiendo opiniones personales de desacuerdo de forma algo agresiva o a la hora de haber un mal entiendo o de pedir un cambio de conducta en el otro, era necesaria la mediación de la figura adulta y si había que entonar el mea culpa, les resultaba muy costoso el admitir una equivocación, más bien, todo era fruto de factores externos. También, todo hay que decir, que pude comprobar que había otros menores que su forma de interrelacionarse con los iguales y con la figura adulta era más adaptada. Reconozco que el haber estado en los módulos me abrió los ojos y pensé uff cuanto trabajo, podré hacerlo?

lunes, 26 de marzo de 2012

DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO

El proyecto del que voy a participar durante este semestre lleva como título  APRENDE

Se trata de planificar y llevar a cabo un plan de actuación con la intención de modificar actitudes ante la interacción con los demás en los menores internos en el CEMJ donde voy a realizar las prácticas, incrementando su competencia para una mejor inserción en la sociedad. En definitiva, se trata de favorecer su desarrollo integral, orientándoles en la adquisición de habilidades sociales las cuales van a repercutir en todas aquellas variables que entran en juego cuando nos relacionamos con los demás. Queremos hacerles conscientes de cómo se relacionan, del factor de riesgo que supone la falta de las mismas, la importancia de saber decir no, el saber negociar, la comunicación y el exponer nuestras opiniones y sentimientos de forma adecuada.

Esta idea surge a raíz de haber detectado en la evaluación del Prácticum I una carencia en parte de los menores sobre temas relacionados con la autoestima, la presión de grupo, el saber decir no, el saber negociar, la comunicación y la percepción del riesgo.

Se podría decir que casi la totalidad de las teorías existentes sobre la delincuencia juvenil concluyen que, en un acto delictivo interrelacionan un amplio repertorio de factores biopsicosociales y adaptativos. M. Rutter expone los mecanismos que, desde su punto de vista, determinan que una persona llegue o no a delinquir, entre los que se encuentran: la oportunidad de realizar el acto en cuestión, la inexistencia de vigilancia, la percepción del coste y/o beneficio, la existencia de un contexto de inhibición/facilitación (grupo de iguales, modelos de referencia, etc.), los rasgos de personalidad, o la falta de herramientas y recursos que le permitan al menor dar respuestas adaptativas entre otros.

Según Gil, F. y León Rubio, J.M. la falta de habilidades sociales pude desembocar en rechazo o al menos a una no integración, lo que a su vez fácilmente puede llevar a un excesivo aislamiento social o bien a comportamientos agresivos. La falta de habilidades sociales afecta negativamente a la autoestima, engendrando ansiedad, falta de confianza e inhibición social, formando un círculo cerrado el cual propicia la producción de pautas comportamentales dañinas, las cuales pueden desembocar en actos violentos y delictivos; observándose por el contrario que el poseer un adecuado nivel de habilidades sociales facilita la extinción de conductas desadaptativas, la aceptación social y el aprendizaje de conductas alternativas, favorecedoras de estilos de vida más saludables, por ello, el entrenamiento en habilidades sociales se ha visto como uno de los factores que pueden influir en una verdadera y completa reinserción.

Los Objetivos Generales que se plantean son:
  • Tomar conciencia de la importancia de poseer un adecuado nivel de competencia social.
  • Mejorar su competencia interpersonal individual en diferentes situaciones sociales.

Se trabajará en grupos, ya que es un hecho demostrado que, la aplicación de las Técnicas para el Entrenamiento en Habilidades Sociales trabajadas de forma grupal, conlleva una serie de ventajas frente a su aplicación individual, ya que se aprovechan mejor los recursos y el grupo en sí mismo es el escenario natural donde aprender, practicar, perfeccionar y generalizar las habilidades, siendo éste el eje central en la promoción del aprendizaje. (Harris, 1977; Liberman, De Resi y Mueser, 1989).

Los sujetos que participarán de este proyecto, serán en un principio aquellos menores con los que se trabajó la vez anterior y que se detectó en ellos una carencia en lo que a competencia social se refiere. El grupo será pequeño de unos 8 participantes máximo (en principio pensamos empezar este proyecto de forma piloto, para su posterior generalización al resto de menores del Centro).

El plan de trabajo que se presenta de partida se dividirá en varias fases las cuales serán flexibles adaptándose a las diferentes circunstancias y situaciones que puedan producirse. Se trabajará desde la colaboración de todos los actores implicados (Tutor, Equipos Técnicos, Equipos de Atención directa y Menores).

Se partirá de una primera fase en donde se tomará contacto con la realidad, familiarizándome con las diferentes herramientas que podrían utilizarse para valorar el nivel de competencia social de los menores, así como sus características estudiando los diferentes informes, los objetivos y evolución de los mismos reflejados en los PIEM (programas de individuales de Ejecución de Medida), los programas que se han llevado a cabo, etc.


 
En la segunda fase se tomarán los acuerdos desde un enfoque colaborativo a través de las distintas reuniones que se mantendrán con los Equipos Técnicos y de Atención Directa, estableciendo un calendario de trabajo, realizando una selección de los menores que participarán en el proyecto, por otra parte, se matizarán los objetivos de cada una de las actuaciones.

La tercera fase es la que corresponde con la elaboración del proyecto, se realizará un seguimiento semanal o quincenal (a determinar por el Equipo) con respecto a la realización del proyecto. También se contemplará un seguimiento mensual en el que se realizarán reuniones de Orientación (con los respectivos Equipos Técnicos y tutores de los distintos Grupos de Convivencia), registrando los acuerdos y las incidencias encontradas dotándole así de carácter flexible y dinámico en relación al contexto de intervención.

Sobre la cuarta fase decir que corresponde a la implementación del proyecto es donde se llevará a cabo la intervención con los menores. Será necesaria la participación y colaboración de todos los actores de la intervención. Se evaluará el proceso de trabajo seguido para la consecución de los objetivos y los resultados, se registrarán las incidencias y se comentaran en las diferentes reuniones que se mantendrán con los Equipos de Atención Directa y Técnicos. Con respecto a las actividades se evaluara la actitud e incidencias, comportamiento e implicación de los menores mediante cuestionarios donde se puntuaran las diferentes áreas.

La Evaluación corresponde a la quinta fase en ella se revisarán los materiales, las incidencias producidas se analizarán las diferentes fichas de registro de las actividades, contrastarán las evaluaciones iniciales con las finales y se llevará a cabo una auto valoración, debatiendo en reuniones los resultados obtenidos llegando a conclusiones sobre el proyecto.